¿Qué hemos aprendido en 2064 años?
Hablando de líderes, Marco Tulio Cicerón (106 a.C. - 43 a.C.) fue un estadista en todos los sentidos: buen orador, hábil escritor, filósofo, historiador, jurista y político. Fue Cónsul de la República Romana y compartió el poder con Cayo Antonio Hybrida.
Como político, mantuvo una férrea oposición a las onerosas empresas romanas: la guerra y expansión en tierras nuevas o bárbaras, sobre todo si la conquista implicaba dotar a los nuevos territorios de exenciones fiscales.
Fue un republicano (en el buen sentido de la palabra) por convicción y enemigo de la tiranía. Escribió distintos libros y numerosas epístolas (género común en su época) en los que plasmó su pensamiento filosófico y su oposición a los gobiernos tiránicos de César, Octavio y Antonio, quien finalmente lo proscribe como enemigo y ordena ejecutar.
Un buen amigo compartió conmigo esta frase que Marco Tulio escribió hace 2064 años:
“El presupuesto debe equilibrarse, el Tesoro debe ser reaprovisionado, la deuda pública debe ser disminuida, la arrogancia de los funcionarios debe ser moderada y controlada, y la ayuda a otros países debe eliminarse para que Roma no caiga en bancarrota. La gente debe aprender nuevamente a trabajar, en lugar de vivir a costa del Estado.”
Aparentemente muchos políticos irresponsables, alrededor del mundo, no desempolvaron sus libros de historia.